9/11/2023
Chile – La presencia del fenómeno del Niño ha generado condiciones climáticas propicias para el desarrollo de la Drosophila suzukii, una mosca que amenaza los huertos frutícolas de cerezas en la presente temporada. La mayor humedad relativa, resultado de la primavera más fría y húmeda, especialmente en la región centro-sur, podría favorecer el aumento de poblaciones de esta plaga a partir de la etapa de pinta en adelante, cuando la fruta es más susceptible a los ataques.
A pesar de las buenas condiciones climáticas para la propagación de la Drosophila suzukii, los expertos señalan que los productores han adquirido un mayor conocimiento sobre la plaga en años anteriores, lo que les permite controlarla de manera más efectiva y minimizar los riesgos. Aunque las condiciones son favorables, los expertos creen que lo peor ya ha pasado, y ahora la responsabilidad recae en los productores para mantener la situación bajo control.
A pesar de la aparente mejora en las condiciones climáticas, los expertos enfatizan la importancia de monitorear y controlar la presencia de la Drosophila suzukii en los huertos de cerezas. Se recomienda la instalación de trampas de captura masiva, ubicadas estratégicamente en el huerto y en áreas circundantes, especialmente donde haya especies hospederas de la mosca. La vigilancia y aplicación de insecticidas son cruciales, especialmente desde el quiebre de color en adelante, momento de mayor susceptibilidad para los cerezos frente a esta plaga.
Los especialistas también subrayan la necesidad de una rotación adecuada de los principios activos de los insecticidas utilizados, ya que la Drosophila suzukii puede desarrollar resistencia a los productos. Además, destacan la importancia de seguir investigando y desarrollando herramientas de origen biológico como repelentes, extractos de ají y ajo, así como productos basados en hongos y bacterias, para complementar las estrategias de control.
En conclusión, a pesar de la experiencia acumulada por los productores, la presencia del fenómeno del Niño y las condiciones climáticas actuales requieren una vigilancia constante y medidas preventivas para proteger los huertos de cerezas de la amenaza de la Drosophila suzukii.
