Fecha: 28 de Noviembre de 2023
En una audaz decisión para evitar los desafíos de los bajos precios en el mercado chino, Giddings Cerasus ha demostrado que hay oportunidades más allá del Año Nuevo Chino. A finales de noviembre, la empresa ha dirigido una porción significativa de sus codiciadas cerezas hacia Tailandia, apuntando a brindar frutas de alta calidad para una de las festividades más destacadas y tradicionales del país: el Loy Krathong.
Gonzalo Matamala, gerente general de Giddings en China y Asia Pacífico, declara con orgullo: «Somos la primera empresa en enviar la mayor cantidad de cerezas a Vietnam y Tailandia».
En un giro estratégico, Tailandia se ha convertido en un destino clave para las cerezas de Giddings durante el inicio de la temporada. El motivo detrás de esta decisión radica en el Loy Krathong, un festival anual donde los ciudadanos tailandeses elaboran krathongs, cestas hechas con hojas de banano que simulan pequeñas embarcaciones, y las lanzan al río adornadas con velas, flores de loto, monedas, palos de incienso y papeles de colores, en un espectáculo deslumbrante de luces y colores como agradecimiento y para desechar lo negativo.
«Este envío fue planificado cuidadosamente para llegar justo antes de la celebración del Loy Krathong», comenta Matamala sobre la festividad de gran importancia para la población tailandesa. «Observamos una oportunidad de consumo de cerezas, ya que las familias se reúnen, salen a comer y se hacen regalos durante este evento», añade el director, resaltando la estrategia a largo plazo de diversificación de mercados que la empresa ha perseguido durante varios años.
Cuando Matamala habla de diversificación, subraya la amplitud de la estrategia. «Estamos buscando actividades o festividades en Asia que trasciendan el Año Nuevo Chino, donde nuestras cerezas y arándanos no solo tengan una ventana de consumo positiva, sino que también generen rendimientos superiores al promedio», explica.
La empresa no solo cumple con su objetivo de brindar mejores resultados a los productores asociados, especialmente en medio de desafíos climáticos, sino que también busca mercados que ofrezcan rendimientos sostenibles a largo plazo. Un ejemplo tangible de este enfoque es el envío a Tailandia, donde las cajas de 2.5 kg se vendieron entre 4,100 y 4,200 baht tailandeses, es decir, entre US$100 y US$110. «Dada la escasa oferta y la baja presión, los precios se han mantenido estables. La proyección es que esta tendencia continúe, siempre y cuando se mantenga la alta calidad de la fruta», enfatiza Matamala.
En contraste, la situación en China a finales de noviembre presenta un panorama diferente. Matamala analiza: «Con los volúmenes en aumento, solo ciertas variedades y tamaños logran obtener retornos favorables, mientras que el resto de la fruta enfrenta desafíos. Por ejemplo, los tamaños más pequeños están experimentando una disminución de precios a finales de noviembre debido al aumento de los envíos a China, lo que ejerce más presión en las ventas».
La estrategia innovadora de Giddings Cerasus de diversificar mercados resalta su compromiso con el crecimiento sostenible y la adaptabilidad en la siempre cambiante industria de exportación de cerezas en Chile.
