18 de diciembre de 2023
La Cámara Argentina de Productores de Cerezas Integrados (CAPCI) se muestra optimista sobre la próxima temporada de cerezas en el país sudamericano, a pesar de las disminuciones en la productividad causadas por la inusualmente fría primavera.
Aníbal Caminiti, director de CAPCI, destaca la alta calidad de las cerezas. En esta cosecha, se ha registrado un retraso en la recolección, de 7 a 10 días más tarde de lo normal, debido a las condiciones meteorológicas, con fluctuaciones mínimas de temperatura entre el día y la noche.
Según Caminiti, si el tiempo permanece estable, a plena capacidad productiva, el volumen exportable en esta temporada debería superar las 6,000 toneladas. Algunas áreas, debido a las lluvias, han sufrido pérdidas que oscilan entre el 30% y el 50%, especialmente en las regiones del Río Negro y Neuquén. Sin embargo, Mendoza y la Patagonia meridional no se han visto afectadas y deberían alcanzar la plena producción.
Durante gran parte de 2023, los problemas meteorológicos han afectado a los productores sudamericanos, principalmente debido al fenómeno de El Niño, que trajo fuertes lluvias y temperaturas más altas. Sin embargo, según Caminiti, gracias a los esfuerzos de los productores argentinos, las variedades tempranas (Nimba, Frisco, Brooks), las más vulnerables, no han sufrido grandes daños.
Alrededor del 50% de la producción de cerezas argentina se destinará al mercado interno, mientras que el resto se exportará a Estados Unidos, Europa y el Medio Oriente.
Fuente: www.corriereortofrutticolo.it
