Fecha: 14 de Diciembre de 2023
La temporada de cerezas en Argentina, marcada por un retraso de 7 a 10 días en la cosecha, ha dado inicio con envíos a China desde la región de Río Negro, según informó Aníbal Caminiti, Gerente de la Cámara Argentina de Productores de Cerezas Integrados (CAPCI).
Las condiciones meteorológicas atípicas, con una baja variación térmica diurna y nocturna, son señaladas como la principal causa del desfase en la cosecha. Tanto Argentina como Chile han enfrentado desafíos similares, con lluvias afectando particularmente la variedad Royal Down en regiones como Río Negro y Neuquén, donde las pérdidas alcanzan entre el 30% y el 50%.
A pesar de estos contratiempos, Mendoza y la Patagonia Austral han mantenido una producción robusta, sin sufrir daños significativos. Caminiti destacó la resistencia de variedades tempranas como Nimba y Frisco, así como la positiva temporada para Brooks en Mendoza.
El fenómeno de El Niño ha impactado a los productores sudamericanos a lo largo de 2023, generando fuertes lluvias y temperaturas elevadas. No obstante, Caminiti resalta la capacidad de los productores argentinos para sortear los desafíos, especialmente en las variedades tempranas.
Aproximadamente la mitad de la producción total de cerezas en Argentina se destina al mercado nacional, mientras que la otra mitad se exporta a destinos como Estados Unidos, Europa y Oriente Medio.
Los envíos aéreos de cerezas a China desde la región de Río Negro comenzaron la semana pasada, y se están evaluando estrategias logísticas marítimas en anticipación a la llegada de los primeros buques chilenos a China. Caminiti expresó optimismo, señalando que, si las condiciones climáticas se mantienen estables y la producción alcanza su capacidad total, se espera superar las 6,000 toneladas exportables en esta temporada, recuperando volúmenes perdidos en la temporada anterior debido a factores climáticos.
Fuente: todoagro.com.ar
